Cada día que pasa mi vida está más al borde del abismo. Cuando parece que era una semana perfecta, en un día y medio se arruina todo. Gente que quiere volver, gente que no quieres volver a ver, y gente que decide no volver a verte. A eso se ha resumido mi final de mi primera semana en España, cuando todo parecía ir tan bien.
Lo peor es lo último, que tras 5 días sin noticias, anoche viniese la bomba nuclear que al fin y acabo, te esperabas, pero nunca pensarías que iba a tener un impacto tan fuerte en ese día. Maldita seas, arrogancia. Y pensar que las últimas palabras que tuviste conmigo fuero "ahora no me bailes el agua". Y eso que justo 5 minutos antes reprochabas lo irreprochable. Aún sigo enfadada, por si lo querías saber.
Además el plan del fin de semana se me está chafando por momentos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario